- Ir a la compra con la lista de ingredientes. Intenta no juntar en la misma compra los alimentos para el consumo diario y los que irán destinados a estas festividades. De esta forma te ajustarás más a lo establecido y no comprarás por impulso.

 

- Evita los ayunos tras las comilonas y retoma tu rutina saludable. Es un error de manual ayunar tras una comida o cena pesada, o desmotivarte por no haber llevado una alimentación saludable durante esos días, pero piensa que son sólo 6 días festivos en los que alterarás un poco tu dieta y después puedes volver a retomar tu rutina saludable con total normalidad, sin sentimientos de culpabilidad y habiendo disfrutado de las fechas señaladas.

 

- Evita llegar a las comidas con el estómago vacío. Es recomendable que mantengas tus almuerzos y meriendas para disminuir las “ansias de comer” al llegar a esaS mesas repleta de cosas ricas.

 

- Puedes comer de todo, la clave está en controlar las cantidades. Evita el picoteo y ponte en el plato lo que vayas a comer. Prioriza lo que realmente te gusta, no comas solo porque esté en la mesa.

 

- Son comidas que suelen ir acompañadas de alcohol, pon un vaso de agua al lado y cuando realmente tengas sed, bebe agua.

 

- Las sobremesas se suelen alargar con la mesa llena de postres y dulces. Lo mejor para eliminar tentaciones, es retirarlos una vez se hayan comido para evitar picotear de forma inconsciente, o en su defecto, levantarnos de la mesa una vez terminada la comida.

 

- Realmente hay muchas más comidas en las que vamos a comer de forma saludable que en las que vamos a cometer excesos, así que disfruta de los días especiales y luego retoma tu alimentación habitual y sigue con tu rutina de ejercicio.

Ahora sólo queda... ¡Disfrutar! ¡FELICES FIESTAS!